Discurso de Nicolás Peláez (Estudiante)

Buenas tardes a todos; directivos, profesores, padres de familia, compañeros y amigos. Acompañando este día especial, yo daré el discurso con el que espero no aburrirlos.

Hoy es un día que probablemente marque un antes y un después en nuestras vidas, para muchos desde este punto en adelante, con este gran logro en la mano decidan avanzar para conseguir una meta más grande… o tal vez no, y simplemente sigan con su vida.

 Aunque no puedo hablar mucho de mi proceso académico a lo largo de los años porque la mayoría de las veces no me acuerdo de las cosas, como qué desayuné hoy, creo que todos podemos estar de acuerdo en que ha sido un camino largo y lleno de altibajos.

 En este ultimo año y medio, algo que aún puedo recordar, por suerte, es que vivimos uno de esos picos: la virtualidad. En mi humilde opinión, creería que empezó en un punto bajo, algo no que no habíamos previsto y fue aumentando (siendo forzosamente optimista) a pesar de todas las dificultades hasta llegar a ser hoy los primeros qualianos en graduarnos virtualmente en pandemia. Nuestras fotos de perfil de Google Meet quedaran talladas en piedra para la historia qualiana.

 Quiero darles las gracias a todos, pero aunque quisiera, no podría mencionarlos en su totalidad y me disculpo por esto, ya que prometí no aburrirlos. Así que aquí van unos agradecimientos de mi parte:

 A la profesora Laura Guerrero por soportarme en este caso curioso, en donde, al parecer, los planetas se alinearon para que tuviéramos 8 horas de clase, más el servicio social. Realmente tiene una tolerancia de acero e ingenio para lidiar con nosotros, especialmente conmigo.

 A Carlitos y Sonia por seguir adelante con este proyecto educativo, quienes nos condujeron hoy hasta aquí y al parecer, la tienen muy clara… esperemos…  para que otros como nosotros tengan la misma oportunidad.

A Myri y al equipo administrativo, la piedra angular de Qualia, que no me imagino cuanto debieron haber sufrido durante este año y medio. Espero que este día compense ese sufrimiento con satisfacción.

Al equipo de profesores por ingeniárselas durante toda la virtualidad para subirnos un poco el nivel de IQ, pese al silencio abrumador de nuestros perfiles virtuales.

Un agradecimiento especial a mis compañeros de curso por hacer las clases más agradables, igual que las tareas. 

Y por ultimo, a mis papas, y a los aquí presentes si se sienten identificados, por apoyarnos, impulsarnos, guiarnos y hasta soportarnos... Nunca cambien.

El futuro es incierto y probablemente nos apuñale por la espalda… ejem, ejem… digo nos abrace y nos llene de éxito, si es que a eso aspiramos. 

Dicho esto, espero que logren devolver el golpe al futuro y conseguir todas sus metas.

Muchas Gracias.


Mariana Gaviria